La Ley de la Segunda Oportunidad permite a los particulares y a los autónomos poner fin a su situación de insolvencia económica mediante un procedimiento que consta de dos fases diferenciadas: la fase extrajudicial y la fase judicial.
En la fase extrajudicial aparece la figura del mediador concursal, objeto de análisis en el presente artículo.
El mediador concursal puede intervenir en cada fase del procedimiento de la siguiente manera:
1. Fase extrajudicial.
El mediador concursal tiene como objetivo facilitar el acuerdo entre las partes. La formación requerida del mediador comprende titulación universitaria o formación superior, así como estudios de mediación acreditados.
Aceptado el cargo por el mediador concursal, éste deberá comprobar la documentación facilitada y, en su caso, requerir al deudor los documentos complementarios en el caso de que deba completarse o subsanarse la documentación inicial. Una vez finalizada esta parte, el mediador deberá verificar los créditos del deudor y presentar una propuesta de acuerdo que deberá tratarse en la reunión entre el deudor y los acreedores.
Cuando el deudor sigue siendo solvente, los acreedores no quisieran continuar con las negociaciones o bien se detectara el incumplimiento del acuerdo, se solicitará el inicio del concurso.
2. Fase judicial: concurso consecutivo.
La ley exige los requisitos profesionales que deberá cumplir el mediador concursal para ejercer, en la fase judicial, como administrador concursal. Entre las funciones que se atribuyen al mediador concursal en la fase judicial encontramos las siguientes: administrar y disponer del patrimonio del deudor, elaboración del informe a los acreedores, así como sus impugnaciones y contestaciones a las mismas, ejercer acciones rescisorias, confeccionar y remitir a los acreedores la lista definitiva de acreedores e inventario definitivo así como modificar el orden de pago de los créditos contra la masa.
Al solicitar el concurso, el mediador, deberá acompañar un informe de la situación financiera del deudor junto a un plan de liquidación o propuesta anticipada de convenio, así como un informe sobre la concurrencia de los requisitos para solicitar la exoneración de las deudas o pasivo insatisfecho.
El papel del mediador consursal a lo largo del procedimiento es importante a la hora de llevar a cabo los trámites de negociación o posterior concurso del deudor.